III:El chi de todas las cosas siempre cambia

III:El chi de todas las cosas siempre cambia

 

 

Sabemos el cambio que se realiza en nuestro cuerpo con el paso de los años. También el cambio anímico, emocional y el nivel de energia que sentimos cuando hay un cambio de relacion. Mientras estamos vivos crecemos, maduramos, evolucionamos, avanzamos y cambiamos tanto físicamente como mentalmente. En el Feng-Shui aceptar el cambio es como una bendición, se aconseja ese cambio para mejorar  la calidad de nuestra existencia  y avanzar continuamente.

Durante el transcurso de todas nuestras experencias surgen grandes cambios internos y externos, al llegar a una edad madura nos casamos o nos unimos en pareja, tenemos hijos, cambiamos de trabajo, nos divorciamos, nos volvemos a casar, acabamos  o empezamos estudios, nos mudamos a otra casa, conocemos otras amistades, cambiamos de ciudad , redecoramos una y otra vez nuestra casa según nuestras necesidades y así un sinfín de situaciones. Cuando nuestro entorno, nuestra casa refleja esos cambios nosotros avanzamos en armonía y acordes a esos cambios. Tenemos que dejar que sucedan y asi disfrutar la evolución personal. Por ejemplo… hacemos recientemente un curso de fotografía y habilitamos un espacio  en nuestra casa para desarrollar esta nueva capacidad de diseño y comunicación y quién sabe nuestra nueva profesión.

Y, las veces que salimos de vacaciones y conocemos nuevas gastronomías, elaboración y presentacion de los platos y los aplicamos en nuestro día a día para disfrutar de ese cambio y así evocar esos momentos a través del  sabor de la comida.Te vas de viaje y cuando regresas has cambiado.Tus  experiencias vividas en ese viaje te han cambiado,posiblemente  al llegar a tu casa tengas la necesidad de actualizar el color  de tu dormitorio,quitar cuadros, poner otras obras o simplente disponer un espacio para pintar, leer o realizar alguna actividad artesanal.Cuando percibes la necesidad de cambiar cualquier estancia de tu casa,debes de  hacerlo lo antes posible, ya que cuando nos abrimos y evolucionamos tenemos la suerte de aceder a nuevas formas de pensar, de sentir y de actuar, al evolucionar avanzamos.

No se trata de hacer grandes cambios a veces el hecho de renovar unos cuantos cojines y poner un jarrón con flores es suficiente, se ha llenado la habitación de vitalidad y nosotros nos nutrimos con ella. Si no seguimos el instinto del cambio¸ la vitalidad de nuestro hogar se desvanece. Los cambios que hagamos no tienen que ser para siempre. El Feng Shui nos dice que tenemos que alegrarnos con el cambio permitirlo y todo lo que nos rodea  evolucione con nosotros. Tu casa te grita y te dice cuando ha llegado el momento del cambio y tú lo has notado más de una vez, cuando cambiamos nuestro espacio vital afirmamos nuestra vitalidad y reforzamos la personalidad.

 

Autor obra - David López 1º Arquitectura

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